13 agosto 2006

¿MISMO PAISAJE?

Ayer pensé algo que ya había, por supuesto, pensado muchas veces, pero son de esas cosas que no se sabe porqué se olvidan: una variación de luz cambia a veces casi profundamente el paisaje. Veo desde mi ventana la ría de Ortigueira, ahí donde casi se confunde con el rio Mera. Casi diría que cada segundo, o al menos, cada minuto, cambia ..... unas veces, es transparente, como un plato, como un lago escocés, reflejando los bosques de sus orillas, y dando una perspectiva de profundidad; otras parece oscura como si la Santa Compaña y la noche residieran en ella; otras .....

Así es también la vida, con cambios de humor, de color, de intensidad, de transparencia, de oportunidades, de límites ....... Así es, en mi opinión, también la realidad de nuestro trabajo de aprendices de formadores ...... El proceso de aprendizaje es vivo, está continuamente transformándose, pero quizás en el fondo no es muy diferente, siéndolo, o no es tan diferente como nosotros queremos verlo. La ría es la misma, pero la luz, el agua, el entorno, mi mirada cambian ..... algunas más rápidamente, otras más lentamente. Necesitamos algo más de seis horas para pasar del pleamar al bajamar y viceversa. Se necesita poco, sin embargo, para que la luz cambie, cuando hay nubes ...... como ocurre en este medio .... las "luces" se suceden ..... los paisajes se suceden .... se parecen, pero son distintos.

¿Aprendo algo de todo esto ....? Bueno, pues si, al menos recupero un pensamiento que otras veces he tenido, pero tiendo a olvidarlo: el espacio de aprendizaje ha de diseñarse como un espacio vivo, no totalmente controlado o controlable, fijándose poco en esos elementos de control y más en los espacios de autonomía y libertad ..... donde aparecen las grandes oportunidades para conseguir hacerlos avanzar ..... el espacio es "previsible", pero no tanto como quisiéramos .....; se puede diseñar, se puede pensar lo que puede ocurrir, pero siempre hay nubes que transforman la luz y el paisaje se modifica ..... tantas veces sin que seamos del todo consciente de lo que ha pasado, aunque veamos sus resultados.